Estas directrices están dirigidas a las empresas y organizaciones que se preocupan por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU y desean contribuir a su aplicación. El modelo de la Economía para el Bien Común (ECG) y su instrumento de control, el Balance del Bien Común, sirven como herramientas estratégicas y de gestión empresarial esenciales para ayudar a las empresas a alcanzar estos objetivos. Según un estudio realizado en la Universidad de Bremen (Alemania), el modelo de la ECG es un enfoque ambicioso para contribuir a la aplicación de los ODS.

Estas directrices están orientadas a la acción. Ayudan a las empresas a encontrar formas de implementar los ODS y a examinar hasta qué punto pueden utilizar el Balance del Bien Común como brújula corporativa y organizativa.

Las directrices ofrecen una visión general de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y muestran qué papel pueden desempeñar las empresas en el cumplimiento de los ODS. Además, examinan qué contribución puede hacer la Economía del Bien Común a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y hasta qué punto las empresas pueden utilizar el Balance del Bien Común para aumentar sus resultados en materia de ODS.

La sección principal de las directrices examina detenidamente los 17 Objetivos de Desarrollo Estratégico y explica qué prácticas empresariales comunes orientadas al bien pueden utilizarse para promover un ODS específico. En primer lugar, muestra qué retos mundiales debe abordar el ODS en cuestión desde el punto de vista de las Naciones Unidas y en qué ámbitos de actuación pueden contribuir las empresas a la consecución de los ODS.

Manuales del Balance del Bien Común